FESCILA: 20 EDICIONES, QUE NO ES POCO
domingo, 20 septiembre 2015
José Luis Cuerda, Gaizka Urresti o los hermanos Trueba fueron algunos de los protagonistas de la última edición del Festival de Cine almuniense, que tuvo lugar del 9 al 16 de mayo. Bajo el título “El año que nací yo”, FesciLA quiso echar la vista atrás y regresar a ese 1996 que le vio nacer. Pocos podían imaginarse hasta dónde llegarían veinte mayos después las entonces Jornadas de Cine “Villa de La Almunia”.
Aquí os contamos cómo fue la edición 2015.
Sobre las tablas del Cine Salón Blanco, José Luis Cuerda miró fijamente a Florián Rey –a la estatuilla, no al cineasta –. Todo lo que representa la figura de Florián, junto con el talento y la experiencia cinematografía recogidas en una misma persona, la de Cuerda, hizo ver que veinte ediciones –19 años –del Festival de Cine de La Almunia (FesciLA) no son nada. Pero son veinte, que no es poco. Ni sencillo.
Pero hemos empezado por el final. Aunque José Luis Cuerda fue la estrella de la vigésima edición al recibir el premio Florián Rey, esto ocurría en la gala de clausura, y FesciLA 2015 comenzaba una semana antes con la entrega del “Villa de La Almunia”. El productor, guionista y director Gaizka Urresti recogía durante el acto de inauguración el premio “Villa de La Almunia”, un galardón entregado por el ayuntamiento almuniense a propuesta de la Asociación Florián Rey, organizadora del Festival. Con él se quería reconocer no solo la labor de este cineasta vasco en nuestra comunidad sino también su vinculación y amistad con La Almunia y su festival de cine. Los actores Luis Varela y Jorge Asín, protagonistas del primer largometraje de Gaizka, “Bendita Calamidad” –se estrenará en 2016–; el escritor y periodista, Miguel Mena; y el fotofija del cineasta, Iñaki Aláez, quisieron darle una sorpresa y acompañarle en esa jornada tan especial.
Tras la entrega del “Villa”, se estrenó el espectáculo conmemorativo del 20 aniversario de los festivales de Fuentes, Zaragoza y La Almunia: “Que 20 años no es nada”. Un recorrido visual por las tres muestras y un homenaje al cortometraje aragonés y al cine español en general que sorprendió y emocionó a los espectadores e hizo rabiar a los que se lo perdieron. Si eres uno de esas personas, todavía puedes disfrutarlo en las inauguraciones de Fuentes y Zaragoza.
Quien no falla nunca a la cita de FesciLA es el cortometraje: más de 460 trabajos se presentaron este año a la muestra de cortos “Adolfo Aznar”. De entre todos ellos, 33 fueron seleccionados por el Jurado y se proyectaron durante la semana del Festival para que los espectadores decidieran el premio del Público.
Pero también hubo espacio para el largo. FesciLA quiso echar la vista atrás y recordar el cine que le vio nacer, el cine de 1996. Por esa razón se proyectaron ‘Two Much’, de Fernando Trueba; y ‘El día de la Bestia’, de Álex de la Iglesia, las dos películas más taquilleras de aquel año. Por otro lado, también se pudo disfrutar de ‘Los girasoles ciegos’ (2008) y ‘Amanece que no es poco’ (1989), en homenaje a José Luis Cuerda, premio ‘Florián Rey’ 2015. Hubo que esperar al penúltimo día, al viernes 15, para disfrutar de uno de los platos fuertes de esta edición: la tradicional mesa redonda.
Los directores Fernando y David Trueba participaron en esa mesa junto con el periodista Luis Alegre y la realizadora Vicky Calavia para charlar sobre la evolución del cine español en las últimas dos décadas y sobre el cine rodado en Aragón. A propósito de esto, tras el coloquio se proyectó el documental ‘Aragón Rodado’, dirigido por Calavia. Aunque los verdaderos platos fuertes esperaban en el restaurante El Patio. Qué mejor manera de sentir el cine que comiéndoselo. Este año la “cena de cine” también estaba de aniversario y para su 15 cumpleaños se degustó la película ‘Un viaje de diez metros’ (Lasse Hallström, 2014).
No hay buena película sin un buen final. El sábado 16 de mayo, el Salón Blanco acogía una vez más la clausura del Festival de Cine de La Almunia. Una gala presentada por el actor Nacho Rubio y en la que se entregaron los premios de los concursos de cortometrajes y guiones para cortometrajes –este último volvió a superar en esta edición el centenar de trabajos recibidos–, y se nombró Socio de Honor a la Asamblea para el Impulso Económico y Comercial de La Almunia (AICELA).
Aunque, sin duda, el galardón más esperado era el Florián Rey. Con él se premió al que se considera uno de los directores clave dentro de nuestro cine: José Luis Cuerda. En la filmografía del director, guionista y productor albaceteño se encuentran títulos como ‘El bosque animado’ (1987), ‘Amanece que no es poco’ (1989), ‘La lengua de las mariposas’ (1999), ‘Los girasoles ciegos’ (2008) o ‘Todo es silencio’ (2012). Con el Florián Rey se reconoce su labor dentro del cine español, pero no su carrera como algo cerrado, pues todavía nos queda Cuerda por disfrutar. Como él mismo reconocía en La Almunia: «Por mi haría una película cada dos años o tres, estoy deseando rodar. Echo de menos rodar».
Y así quedaba clausurado el FesciLA. Pero solo hasta el próximo mayo y con mucho cine del que disfrutar hasta entonces. Como dijo Carmen Pemán, directora del festival, durante su discurso en la gala: “Llenad vuestras vidas de cine y llenad vuestros cines de vida”. Porque si algo está claro después de veinte ediciones es que todos somos contingentes, pero el cine es necesario.